Spaguettybastard - Xibalba
Y estaba el cabrero padre
entristecido y desconsolado
pues su hijo el cabrero chico
le había mentido, le había arruinado,
¿dónde estaba la educación que le había dado?
¿qué fue de la confianza por ser su hijo?
Cabrero hijo comenzó a ser el responsable
de sacar a diario a los bichos,
de cuidarlos y alimentarlos
de que conocieran la sierra,
ese su pequeño mundo
esa era su responsabilidad
ese era el sentido de su vida.
Todos los días cuando el sol descansa
guardaba el ganado y los contaba,
un buen día con las prisas
cinco olvidó en la cima,
apuntó igualmente las cien cabras
y en un lado anotó menos tres que no han vuelto,
la semana siguiente por el desfiladero
vio como dos animales cayeron
al fondo del precipicio,
volvió a contar cien
hablaría más adelante a padre.
Y en la mesa en casa presumía
de su maña de pastor
de su arte con la manada
y no informaba de nada
pues quien no sabe no se queja
quien no ve no vislumbra.
Una mañana llegó tarde a la cima
faltaban seis cabras, seguro robadas,
hizo cuentas y pensó,
“denunciaré el robo y las recuperaré”
por la noche contabilizó de nuevo cien.
Y fueron pasando los meses y los apuntes crecían
y las cabras menguaban
y el cabrero chico ya no hacía cuentas
tan solo apuntaba cien
pues era una cifra mágica,
al nombrarla la familia se felicitaba
se había convertido en mago
su realidad era lo que contaba.
Y su padre cabrero
se recuperó
subió a los corrales
y ya nada había,
todo era una pesadilla.
Esas historias de pastoreo
esas excusas que daba,
ese cinismo descarado
ese cien apuntado
mentiras, mentiras, mentiras
y es que no hay nada peor
que te insulten a la cara
dando unas cifras falsas
lavando tu sucia conciencia
no asumiendo errores
unos tras otros
pues la verdad prevalece
y las cabras no están
por mucho que digas cien
por mucho que las pintes
por mucho que las cuentes…
Y el Cabrero le dijo a su hijo:
"Cabrero chico ya no eres mi hijo
eres como una cabra
de las que han desparecido
eres uno más entre cien,
para mí solo eres una mala mentira…"