Pues no sé qué
decir
en tan número
singular,
visto lo
visto
es evidente que
da lo mismo,
que sea un
número palíndromo
o que sea el
número atómico del bario,
da igual que
sea una cifra fea
o que supure
belleza por sus costados,
lo
importante es que estamos
aquí para
contarlo,
en este puto
año loco
donde todos
nos la prometíamos
encantados y
muy felices.
Pero como algún
significado ha de tener,
56 son las
etnias chinas
y ya sabemos
dónde comenzó todo,
en una
extraña representación teatral
del trágico
teatro chino,
donde el
protagonista
se comía a
uno de sus lacayos
y Mogwai maldijo
ese día
con una lluvia de mortales gremlins.
Por eso solo
espero
que este año
vaya por libre
y que 56, 20
y 21
sean solo
eso,
números por
los que pasa uno,
como todos
los pasados,
como los que
me queden por pasar,
procurando no mojarme mas de lo debido...
Adió |
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