Supón que te digo que lo que te rodea no es más que un
sueño
que todo lo que has vivido nunca ha existido
¿no sería
maravilloso?, ¿espectacular?,
el poder despertar en medio de tus sueños
ver que la realidad no existe, que tú no eres tú,
que yo soy tú, que
tú eres yo…
Paseo por avenidas vacías, entre la multitud,
ando hacia atrás, para ver el pasado mejor,
eres mi pesadilla y mi sueño.
Somos un espejo enloquecido en medio de nuestro camino
a la mitad del mismo lo atravesamos y avanzamos de espaldas
hacia el final.
Recorrido caótico…
Y caes flotando hacia el tejado de tu ser
en el que se puede ver el mar
mar de dudas, mar de amar, agua fresca.
Te quiero por haberme acompañado hasta el final,
por arroparme en mis sueños,
por cantarme nanas de amor,
por hacerme ver vida mía
que nada es real…
No hay comentarios:
Publicar un comentario
No repares en comentar, que por decir que no quede tu disconformidad o tu adhesión inquebrantable, el no exponer este espacio quedará simplemente vacío, como un voto en blanco...