sábado, 30 de enero de 2016

NUESTRO LADO OSCURO – EL JARDIN DE LA MUERTE



La maldad humana,  ¿nace o se hace?, al principio es una parte más de nuestro mundo, una parcela como otra cualquiera, algo más sombría, contrapeso de otras zonas, en la línea de salida todo es neutro, difuso… pero pronto empezamos y empiezan a acotar bien todo nuestro yo y la zona oscura, siniestra de nuestro ser inmediatamente se crea un muro y se encierra tras una imaginaria primera puerta y ¿por qué hacemos esto?, porque nuestro lado malo que existe es muy poderoso, atrae y se alimenta constantemente de nuestros miedos, frustraciones y experiencias negativas…

Si nos encaminamos mal desde un principio, durante la infancia iremos macerando cuidadosamente lo negativo, con mimo; pudiera ser por abandono emocional, si en tus principios nadie se ocupa de abonarte, regarte y enseñarte tu parte positiva y solo recibes el vacío emocional, por inercia, como agua que baja la ladera ira encharcando tu lado yermo y tus emociones se irán llenando de pequeñas pero intensas motas de maldad, el no entender el porqué de tu situación comparada con la de tus iguales será el decorado que torturará tu parte oscura… pudiera ser por el abono intencionado de tu parte negativa por parte de adultos carcomidos por la maldad o podridos totalmente por ella que hará mucho más fácil hacer que el niño que llevabas dentro sea devorado por su parte sin razón, a fin de cuentas nuestra zona oscura si queremos es autosuficiente y eso en si da mucho mas placer (AUTODESTRUCTIVO)

El lado positivo si se ha cuidado siempre prevalece, evidentemente en mentes más o menos sanas, nadie macera lo negativo, ni lo abona, tan solo lo encierra y lo aparta a lo mas fondo posible de su zona oscura, hasta que se queda petrificado, inerte, olvidado para siempre, pero ¡ojo! no muerto. Uno va llenando su cuarto oscuro con sus malas experiencias y sus malos pensamientos y la maldad sigue al fondo sin mezclarse con nada, pura…

Tan solo en la adolescencia cuando nuestro yo está en ebullición y tenemos los sentimientos incontrolados,  es ahí dependiendo de cada cual, que inconscientemente algunos entran a su zona oscura y despiertan durante instantes a la bestia, da muchísimo placer, es una droga de sentimientos, es un segundo en que se nos muestra e inmediatamente el mal vuelve a su oscura guarida nos mira y nos quedamos petrificados, los remordimientos, la congoja nos inunda y pronto dejamos de hurgar en lugar tan peligroso y absurdo.

El problema es que la bestia en el regreso al averno  puede dar un cruel zarpazo, ahí engancha a muchos y entonces están ya perdidos porque la herida infecciosa del mal está hecha,  y su alma quedará encerrada para siempre en su lado oscuro.


Recordad no juguéis en el jardín de la muerte, podréis perder el alma y fallecer por dentro….

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No repares en comentar, que por decir que no quede tu disconformidad o tu adhesión inquebrantable, el no exponer este espacio quedará simplemente vacío, como un voto en blanco...

POLÍTICOS ACTUALES